Se habla constantemente de la Ley de Dependencia en los medios de comunicación, pero ¿tienes claro en qué consiste? ¿Por qué se ha creado esta ley? ¿Quiénes pueden acceder a ella?
La Ley de Dependencia surge de la necesidad creada a partir de nuestro modo de vida. Gracias al incremento de la esperanza de vida, cada vez son más las personas alcanzan más edad, pero no siempre pueden valerse por sí mismas. Por ello, desde el ámbito público se establece un sistema que permita dotar de recursos y servicios a las personas dependientes.
En definitiva, se garantiza un nuevo derecho a los ciudadanos con la Ley 39/2006 de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia.
Principios de la Ley de Dependencia
El principio más importante de esta nueva ley es su carácter público y universal. Esto implica que son el Estado y las Comunidad Autónomas los encargados de financiar las prestaciones y que estas últimas son para todas las personas que lo requieran.
La ley recoge también otros principios como que todos accederán a estas prestaciones en igualdad de condiciones.
A qué da derecho la Ley Dependencia
- Acceso a servicios y, de modo excepcional, a prestaciones económicas.
- Seguimiento e información sobre la dependencia de la persona.
- Requerir autorización para ciertos procedimientos.
- Confidencialidad de los datos personales.
- Participar en las fórmulas adecuadas para el bienestar de la persona dependiente.
- Decidir quién será el tutor de la persona dependiente.
- Considerar el ingreso en una residencia.
Obligaciones que se deben cumplir
- Facilitar la información solicitada por la Administración, en este caso, la del País Vasco.
- Informar sobre las ayudas que se reciben, en el caso de haberlas.
- Emplear las prestaciones económicas para el fin en el que fueron dadas.
Quiénes pueden acceder a estas ayudas y servicios
Podrán solicitar los servicios aquellas personas que tengan reconocida la condición de DEPENDIENTE en grado III, grado II o grado I (con 25 a 49 puntos) y habrá que cumplir los siguientes requisitos:
- Ser español o con nacionalidad española.
- Extranjeros pero que residan legalmente en nuestro país.
- Menores de edad.
Para ello, se deberá acudir al Ayuntamiento a solicitar y entregar la instancia y la documentación que se indicada.
La Administración pública valorará el grado de dependencia basándose en informes médicos, el entorno habitual y la entrevista personal. A partir de toda esta información, se decidirá el grado de dependencia, así como los servicios a prestar.
Tipo de prestaciones sociales
Existen una serie de prestaciones sociales para las personas dependientes. Estas son de dos tipos prestaciones comunitarias y prestaciones institucionales. Estas últimas son centros de día, residencias, plazas públicas y estancias temporales en residencias.
En las de carácter comunitario, tienen la ventaja de que la persona podrá seguir en su residencia habitual. Estaríamos hablando de: teleasistencia y ayuda a domicilio.
Precisamente, SINA comparte esa misma idea (siendo portadora de estos servicios) de que las personas dependientes, sobre todo aquellas con enfermedades degenerativas e irreversibles puedan vivir su última etapa en el calor de su hogar, de su casa y en ese ambiente que conocen o sea su FAMILIA y de la mano de una ASISTENTA PERSONAL que se encargará de sus cuidados profesionales.
Por esto, también te ayudamos y asesoramos para poder solicitar las prestaciones para personas dependientes.